Entrevista a Ernesto Hernández Busto

Ernesto Hernandez Busto


Hace unos días la prensa informó sobre un escritor cubano que recibió en Madrid el premio Ortega y Gasset que mereció la escritora Yoani Sánchez. Se llama Ernesto Hernández Busto. La razón principal del encargo: son amigos.

Y ambos dieron una lección. Yoani porque pudo haber escogido para realzar su premio una personalidad política del momento. Ernesto, porque como director de “Penúltimos Días”, el decano de los blogs sobre asuntos cubanos, escritor y editor, podía merecer él mismo algunos de los premios que rondan el ambiente. Razones adicionales puede encontrarlas el lector en esta entrevista que le ha hecho RM a Hernández Busto, quien reside en Barcelona.


Radiografía Mundial: Recuerdo que pocas horas después del 31 de julio de 2006, día en se anunció el "traspaso de poderes" de Fidel a Raúl Castro, nos hablaste de hacer un blog llamado "Penúltimos Días" (PD). Yo empecé ahí, y después abrí un blog propio. Es decir, que yo se cómo se me ocurrió el mío, pero la idea de PD, cómo la concebiste tú.

Ernesto Hernández Busto: En realidad la idea se fue incubando con varios ejemplos; sobre todo mi lectura diaria del blog de Arcadi Espada y la práctica de un blog de campaña electoral para el partido Ciutadans de Catalunya. El 31 de julio, lleno de rabia por lo que leía en la prensa, se me ocurrió hacer un blog cubano donde tres personas (el proyecto fue colectivo desde el comienzo) dijeran todo lo que llevaban años guardándose para las conversaciones privadas. Un blog incorrecto. Un blog contra Fidel Castro, y contra la idea de que Fidel Castro no era la clave, no era una pieza importante. Esas tres personas fueron Emilio Ichikawa, Néstor Díaz de Villegas y yo mismo. La idea era que el divertimento durara un par de meses, entregarle la función mediática al exilio y hacer crítica inteligente. Si se mira el archivo se verá que por esos días cada uno de nosotros escribía casi a diario sobre el tema Castro. Esa era la idea: agotar el tema.

RM: Si se revisan las publicaciones en los días posteriores a dicho evento, uno detecta cierto desconcierto; incluso periódicos importantes sobre el tema cubano no decían nada, como que se creó un vacío de saber. ¿Cómo recuerdas aquellos días?

EHB: La verdad es que lo pasábamos bien, ¿no? Había que hacer una crítica de la prensa. La gente de nuestra generación nunca había hecho eso --y creo que los de la anterior tampoco. También quería de-mostrar el fracaso y la estafa mediática que representaba el periódico digital Encuentro en la Red, que hasta entonces era el sitio más conocido y casi único de noticias sobre Cuba. Quería demostrar que se podía hacer algo mejor con un presupuesto casi nulo y aprovechando al máximo el lenguaje de Internet. Y creo que eso se ha hecho.

RM: En el último número de la revista Encuentro de la Cultura Cubana, Iván de la Nuez dice en una entrevista realizada por Antonio José Ponte que los blogs cubanos como que han invertido la lógica. Es decir, no son el resultado lógico de los tiempos y la necesidad de superar de las limitaciones de la prensa tradicional sino que son más bien los sustitutos de una prensa que no informa, que no existe. ¿Estás de acuerdo con la observación? ¿Se trataría de una anomalía?

EHB: Iván tiene mucha razón. El conoce muy bien el fenómeno, pues tiene a varios amigos que trabajan desde hace tiempo con blogs y en el lenguaje de Internet. Los blogs no son resultado de una "evolución" de la prensa; son otra cosa. Parten de un cambio en la idea de la noticia o en el concepto mismo de lo noticioso.

El reto de la información y del mercado de la comunicación en la época de Internet impone una perspectiva nueva que, sin embargo, no elimina la función del medio noticioso. Seguimos necesitando que alguien nos haga "el guión del día" o nos cuente "qué ha pasado". Que alguien interrumpa ese flujo continuo de información, comparable al fluido eléctrico, y lo regule a partir de interruptores y canales. El mundo de la información "sindicada", de la distribución de contenidos vía RSS -que ha llegado a ser vista como un "sírvase usted mismo las noticias"-, esa red capilar y redistributiva con la que teóricamente el ciudadano podría construir su propia dosis de información diaria, no ha sustituido en la práctica las funciones que otorgan su razón de ser al medio informativo per se. El verdadero reto es, por un lado, adecuar el medio a esa necesidad universal, y por otro, rearmar su definición a partir de la revolución que ha tenido lugar con las nuevas tecnologías. Flexibilizar el medio implica también intentar que el periodismo abarque, desde sus ineludibles exigencias de objetividad y ciertas predisposiciones ideológicas, algunas zonas de la realidad que han acabado excluidas, no sólo por el discurso periodístico, sino también por la literatura y otras formas de narración de lo real.


RM: Una de las limitaciones básicas que encuentro en la mayoría de los blogs es que no funcionan como empresa; es decir, no dejan ganancias. Creo que el mismo Penúltimos Días se mantiene con un gran esfuerzo de tu parte, e incluso digamos que con sacrificio. ¿Cómo se puede revertir este asunto?

EHB Supongo que hay que ganar prestigio, visitantes, influencia y entrar --como todos los medios periodísticos en el mercado de la publicidad. Y pedir dinero por el servicio. Creo que ese es el camino. No se lo recomiendo a nadie.

RM: Otro punto interesante es el tema de los comentaristas. En particular de los que firman como "anónimos". ¿Se debe controlar el comentario? Si la respuesta es afirmativa ¿No estaría funcionando entonces el "blogger" como un censor a la usanza de la prensa tradicional?

EHB: Me parece bien que se dejen opiniones anónimas. Es parte del espectro libertario del medio. No me parece bien, sin embargo, que una misma persona deje una oleada de comentarios en un solo sentido, tratando de crear artificialmente y de manera inmediata un "estado de opinión" sobre un tema determinado. Eso es burda manipulación. Todo lo demás es flexible, incluyendo las ofensas personales, a las cuáles siempre hay derecho a protestar. Creo que la gente no aprovecha el anonimato, o las ventajas del anonimato. Podrían crearse una nueva identidad y todo lo que hacen es reproducir los vicios de la propia. Pero este asunto de los comentarios es engañoso. Las estadísticas y mi experiencia en el asunto muestran que apenas un 10% de los visitantes de un blog participa activamente dejando comentarios.

RM: Bueno, para terminar. Sé que estabas en otros proyectos, digamos que extensos. Se hablaba de una biografía de Lezama Lima, un libro… bueno, la pregunta es, ¿es el periodismo un "enemigo de la promesa? ¿Te ha sacado este empeño de tus proyectos como escritor?

EHB: Sí, me ha sacado más bien de la "carrera" de escritor, aunque me ha enseñado muchas cosas que tienen que ver con la literatura. No me siento sacrificado, porque leo mucho y escribo más que antes. La biografía de Lezama va por el capítulo 6 de 15; tal y como la tengo concebida, es una cosa que llevará su tiempo. La biografía que hizo Nicholas Shakespeare de Chatwin, por ejemplo, que es uno de mis modelos, tardó ocho años. No creo que una de Lezama que vaya más allá de lo que se ha escrito sobre su vida merezca menos. No hay prisa, ya tengo acumuladas suficientes exclusivas sobre Lezama para que el libro se lea aunque salga dentro de diez años. Lo del blog es otra cosa.